Entre la depresión y
la alegría, un vaivén de emociones pastelosas, sentimientos encontrados y de
experiencias generalizadas. Dejemos de hablar de La Libreta Otaku. Y hablemos
de Umibe no Onnanoko. Literalmente: “Una chica en la orilla”; manga del
emo-depresivo -pero por cariño- Asano Inio, autor de otras obras recomendables
como “Oyasumi Punpun” y “Solarin”. De solo dos tomos, 20 capítulos en total,
publicados del 2007 hasta el 2013. Serializada por “Manga Erotics F”, con solo
ver “Erotic”, ya sabemos a lo que nos enfrentamos.
La Historia como tal:
Saitou Koume, una chica de escuela, después de sufrir por el
rechazo constante del chico del cual ésta interesada, que solo la ve como un “objeto
sexual” y no desea ser su pareja. Ya que él sueño de ella es encontrar a su “príncipe
azul” o algo por estilo. Ella llorando en la orilla del mar, se consigue con
Isobe Keisuke; un chico que antes le había dejado claro que el sentía algo por
ella, le ofrece de consuelo tener sexo con él; Ella acepta, y decide usarlo, no
a él, sino a su aparato reproductor masculino, como amante.
Mi Opinión:
El trabajo de Asano Inio, siempre ha sido –según lo que he
leído- el contar la verdad de las fantasías que no pueden ser cumplidas;
hacernos ver la realidad más realmente como se ve, mostrando la depresión
constante de sus personajes en la lucha de encontrar la verdadera felicidad.
Umibe no Onnanoko, no es una excepción, pero tampoco es una maravilla –honestamente-,
ya que recae en la repetición de la perversión, lo cual no ésta mal, si se
expande a través de ella una sub-trama que no habíamos pensado y se hizo, pero
moderadamente y casi al final de la historia. Lo que nos dejó buenas imágenes, y
sí, un final bonito. El nombre de la obra vendría siendo que ella ésta luchando
con ella misma al igual que el co-protagonista, que ésta en la orilla de un
nuevo mundo, que no se ha atrevido a cruzarla por miedo de ser lastimado(a), y
se conforma con cualquier actitud que su débil mente, le parezca correcto,
hacerlo ver como la solución de sus problemas, sin ver que claramente, lo hace
por simple excusa de no superar sus debilidades.
En definitiva no es que sea mala, solo es una percepción de
algo que se ve gradualmente en nuestras vidas, que no nos hemos atrevido a
aceptar como “realidad”. Y no es que no haya disfrutado de las escenas
eróticas, es que cuando se hace repetitivo, por simple capricho recae de valor.
*Recomendable leer en una iglesia, con un video beam, y
escuchando hard metal.
Bueno es solo opinión
personal
Hasta la próxima.
Chau.
